La actual realidad empresarial venezolana, donde un nuevo mercado de tamaño reducido impone hábitos de consumo adicionales, con presencia de nuevos actores y algunas reglas de juego hasta ahora poco conocidas; exige no seguir operando del mismo modo que otrora, sino desarrollar habilidades para dejar atrás cualquier vestigio de un pasado donde los subsidios, los créditos y los controles ocultaban la ineficiencia de las organizaciones.
Repensar las estructuras que ya no funcionan tan bien como antes, trae consigo también repensar la oferta, los productos, el talento y por supuesto perseguir la competitividad principalmente mediante la costo-eficiencia.
Clientes satisfechos
El sector retail o comercio minorista, tiene ante sí el reto de mejorar la experiencia de compra presencial al reducir los tiempos de espera en cola en las cajas y minimizar los riesgos de no poder dar respuesta oportuna al cliente, al contar con acceso continuo a los sistemas de apoyo a la gestión de las tiendas. Esa continuidad operativa se logra con tecnología.
La tecnología funciona también para incrementar la lealtad de los clientes y entregar una misma calidad de servicio independientemente del canal que utilicen, así como mejorar su experiencia de compra en línea y optimizar los costos asociados a rotación de inventarios y distribución de mercancía.
Y es que para alcanzar las metas de ventas, eficiencia operativa y rentabilidad, las cadenas de tiendas requieren asegurar la satisfacción de sus usuarios, tanto en sus tiendas físicas como en sus canales virtuales, permitiendo que estos adquieran y reciban sus productos dónde, cuándo y cómo lo deseen, con la mejor atención posible.
Información segura
Así como es importante conocer lo mejor posible el gusto de los consumidores, es fundamental para el control del negocio el mantener el flujo de información constante entre cada tienda, la oficina principal, su centro de distribución y el resto de sus dependencias, con la certeza de que dicho flujo cuenta con la seguridad y la protección necesarias.
No olvidemos que las empresas que no sean costo eficientes, que no puedan resolver sus ineficiencias y ser competitivas, tarde o temprano, van a ser reemplazadas o desplazadas, sobre todo en una economía dolarizada como lo es la venezolana.
Soluciones para eficiencia
Es por ello que las empresas dedicadas al comercio al detal, requieren de habilitadores tecnológicos capaces de proveer soluciones integrales que permitan mejorar la eficiencia operativa y la rentabilidad, por medio de la optimización de costos asociados no solo con rotación de inventarios y distribución de mercancía -al integrar las aplicaciones de e-commerce a sus sistemas de manejo de inventarios y logística-, sino también con costos asociados con sus plataformas tecnológicas al hacer uso de la opción de pago por su uso: el modelo XaaS o todo como servicio.
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Jorge Espinoza
jlespinoza2@gmail.com