Tradicionalmente, las empresas tenían la idea de realizar grandes inversiones en equipos e infraestructura de tecnología para mantener sus operaciones in house y tiempo atrás, eso daba resultados.
Sin embargo, hoy día, hacerse de tecnología puede resultar además de costoso, una pérdida de tiempo e incluso, en el peor de los casos, puede golpear la estabilidad económica de las empresas. Y es que la tecnología tiene dos caras, una, la que se ve, lo tangible y otra la que no se ve. Licencias, soporte, necesidad de conocimiento especializado, upgrades, entrenamientos, integraciones, parches, por citar algunas…
¿Qué ocurrió?
Evolucionamos, y no sólo desde el punto de vista tecnológico sino como usuarios. Esta disrupción, porque lo que está claro es que el modelo de adquisición están feneciendo, supone un reto enorme para los negocios y urge buscar las herramientas necesarias, partners o alianzas estratégicas que fijen la ruta de transformación para cada empresa.
No está por iniciar, ya arrancó
Si aún no estás convencido, mira a tu alrededor. Lo que encontrarás son nuevos términos, tecnologías e incluso estructuras organizacionales completamente distintas, y la mejor recomendación y única para darte es que tú no debes ser solo un espectador. Con el acompañamiento ideal, puedes convertirte en un player y entrar en un fair play para competir con los mejores.
Entonces… ¿hacia dónde apunta el viento?
Según Linke, una compañia especializada en servicios de consultoría SAP en la Nube, 2019 será el año en que se consoliden las arquitecturas sin servidor o serveless computing. Tendencia que para Gartner será clave en cuanto a infraestructura y operaciones se refiere.
Para la consultora, este tipo de arquitecturas, sin servidor, que ya han sido adoptadas por los principales proveedores, se expandirán como el estándar, incluso, para el desarrollo de aplicaciones nativas cloud.
Optimizar la agilidad es ahora la clave
Por paradójico que suene, podríamos estar viviendo tiempos en que la empresa debe responder a distintos escenarios y realidades en donde el cliente está en el centro de cualquier estrategia o iniciativa de transformación y frente a esto ¿Cuántos tipos de clientes tienes?.
Es tan así, que los grandes proveedores de Cloud están apostando definitivamente por facilitar la adopción de entornos híbridos a sus usuarios, ante el auge del modelo que combina parte de las cargas de trabajo en infraestructura en la Nube y parte on-premise. Esto lleva a colocar el foco de las empresa en la gestión óptima de estos entornos, para sacar el máximo provecho de sus apuestas por la Nube.
Para la firma, se ha percibido un cambio en la parte de gestión. Las aplicaciones ‘core’, de cargas críticas, están iniciando su paso a la Nube para optimizar sus procesos de transformación digital y centrar recursos en el aprovechamiento de otras tendencias.
Bajo una realidad como esta, nos preguntamos ¿hacia dónde crees que apunta el viento?
Andrés Bello – belloa@daycohost.com